fecha de respuesta: 30.12.2024
Generalmente, el compositor de la música y el autor de la letra son coautores de la obra musical, repartiéndose derechos de autor (por ejemplo, 50% música, 50% letra o según pacto). El intérprete tiene derechos afines sobre su grabación. Si la canción se graba, el productor fonográfico tiene derechos de fijación. Inscribir las canciones en SGAE no es obligatorio, pero muy práctico para gestionar la recaudación y reparto de regalías (radio, streaming, conciertos). Así, cuando una emisora utiliza la canción, SGAE cobra y reparte a compositores y letristas. Los intérpretes cobran a través de otras entidades (AIE, por ejemplo), y el productor gestiona su parte.