fecha de respuesta: 26.11.2024
Cada representación teatral implica comunicación pública. El dramaturgo percibe un porcentaje de la taquilla o una tarifa pactada, gestionada habitualmente por SGAE u otra entidad de gestión. El teatro paga a la entidad según un tanto por ciento de la recaudación o una cantidad fija por función. Luego la entidad reparte al autor. Si el dramaturgo prefiere gestionar directamente, puede hacerlo, pero suele ser difícil controlar todas las funciones. Así, SGAE actúa como intermediario, garantizando que cada representación abone la parte correspondiente al autor, que recibe liquidaciones periódicas en función de la recaudación real.