fecha de respuesta: 17.12.2024
La ley contempla la protección de estos animales de terapia, exigiendo un trato cuidadoso, descansos adecuados y supervisión veterinaria para evitar agotamiento o estrés excesivo. Las asociaciones de terapia asistida deben registrarse y garantizar formadores especializados, amén de espacios idóneos para las sesiones. A los caballos o perros se les limita el tiempo de trabajo diario, con pausas y revisiones médicas. Si se detecta que se abusa prolongadamente de la capacidad física o psicológica del animal, se inicia procedimiento sancionador. Así se compatibiliza el beneficio terapéutico para humanos con el bienestar de los animales involucrados.