fecha de respuesta: 25.12.2024
Cuando adquieres junto a alguien ajeno una cuota de un mismo inmueble, conviene regular la copropiedad en un pacto de indivisión. Se puede incluir un derecho de tanteo o retracto interno: si alguno desea vender su parte, ha de ofrecerla primero al otro. Esto evita la entrada de terceros inesperados. También conviene pactar quién asume los gastos de mantenimiento, uso del inmueble, posibilidad de alquiler, etc. Si no se acuerda nada, rigen las normas del Código Civil, que permiten solicitar la división del proindiviso, pudiendo forzar la venta judicial si no hay consenso. Para evitar conflictos, dejad todo claro por escrito.