fecha de respuesta: 03.01.2025
Las plataformas digitales deben cumplir la normativa europea y española que persigue la incitación al odio y la discriminación. Si se publican mensajes o insultos racistas, la red social tiene la responsabilidad de revisar y eliminar contenido ilegal en cuanto tenga conocimiento. Además, la víctima puede denunciar ante la Policía o la Fiscalía de delitos de odio. El Código Penal castiga la difusión pública de mensajes que promuevan la hostilidad contra un grupo. Al margen de la vía penal, se pueden exigir responsabilidades civiles. Con la Ley 15/2022, también se tipifican conductas discriminatorias en internet y se establecen posibles sanciones administrativas.