fecha de respuesta: 12.11.2024
La Ley 16/2011 transpone la Directiva 2008/48/CE al ordenamiento español casi literalmente, añadiendo algunos matices adaptados a la regulación nacional. Establece obligaciones de información precontractual (FEIN), evaluación de solvencia, derecho de desistimiento, amortización anticipada y disposiciones sobre publicidad. Además, contempla la posible anulación de intereses en caso de incumplimiento de información esencial. En lo esencial, no hay grandes diferencias con la directiva, pues la UE pretendía armonizar la protección de consumidores en créditos transfronterizos. Eso sí, se mantuvieron particularidades de la Ley de Usura y otras leyes españolas complementarias.