fecha de respuesta: 10.11.2024
La LOTT contempla que el transportista responde por el equipaje facturado en la bodega, aplicando reglas similares a la responsabilidad por mercancías. El pasajero debe declarar la pérdida o daño inmediatamente. Algunos operadores recogen en sus condiciones generales un límite indemnizatorio. Si se considera equipaje de mano que el pasajero controla, la responsabilidad recae en él, salvo negligencia del transportista. Muchos servicios incluyen un seguro adicional que cubre determinado importe. Si el transportista no ofrece solución, el viajero puede reclamar ante la administración de transportes o vía judicial civil. La cuantía de indemnización depende de la valoración del daño y las cláusulas contractuales, siempre con obligación de prueba del perjuicio.