fecha de respuesta: 11.01.2025
Si tu startup no logra remontar y no puede pagar las deudas, la Ley Concursal obliga a solicitar concurso de acreedores si la insolvencia es definitiva. Antes, puedes intentar un acuerdo de refinanciación o un plan de liquidación amistosa con los acreedores. Si no hay solución, presentas concurso voluntario ante el juzgado mercantil y se designa un administrador concursal para liquidar los activos y pagar deudas. Si no hay culpa de los administradores, no responderán personalmente. Es importante asesorarse con un especialista para cerrar la startup de manera ordenada.