fecha de respuesta: 30.11.2024
La matanza domiciliaria tradicional está permitida en ciertas comunidades bajo condiciones higiénico-sanitarias, pero su carne se destina al autoconsumo familiar y no puede comercializarse. Las autoridades exigen el aturdimiento previo y a veces un control veterinario de triquina. Si deseas vender carne o embutidos, debes sacrificar los animales en un matadero autorizado y cumplir la normativa de inspección. Comercializar productos elaborados en casa sin registro sanitario ni control se considera ilegal y puede suponer sanciones. El Derecho Agrario y la normativa higiénico-sanitaria son estrictos para proteger al consumidor.