fecha de respuesta: 07.01.2025
Es legítimo que el franquiciador exija al franquiciado que el local cumpla ciertos requisitos: extensión, localización, fachada, aparcamiento, etc. Esto preserva la imagen de la red y el éxito del negocio. Sin embargo, debe estar justificado por el modelo de franquicia, no ser un capricho infundado. El contrato habitualmente prevé la necesidad de aprobación del local. El franquiciador no debe imponer condiciones injustas que encarezcan indebidamente la inversión, salvo que resulte indispensable para el estándar de la marca. Es una parte esencial de la uniformidad que caracteriza a la franquicia.