fecha de respuesta: 03.11.2024
Sí, las actividades con música alta o eventos generan contaminación acústica, por lo que los ayuntamientos exigen un estudio acústico que demuestre que el local está insonorizado y no supera los límites de decibelios fijados para cada franja horaria. Este estudio suele hacerlo un ingeniero especialista en acústica. La licencia sólo se concede si se acredita el cumplimiento con la ordenanza municipal de ruidos y vibraciones. Luego, en inspecciones, se miden los niveles reales. Si rebasas, te pueden exigir mejoras en la insonorización o limitar horarios. El control acústico protege el descanso vecinal y la convivencia en el entorno.