fecha de respuesta: 01.11.2024
Sí, las pymes también pueden acogerse a un ERTE por causas económicas, técnicas, organizativas o de producción, o por fuerza mayor (como la pandemia), siempre que cumplan las exigencias legales. Deben justificar la caída de ingresos o la imposibilidad de continuar a pleno, notificar a los trabajadores y negociar un periodo de consultas (aunque sea con un delegado elegido ad hoc si no hay representación). Se obtienen bonificaciones en cotizaciones y posibilidad de reducir jornadas o suspender contratos temporalmente. El objetivo es aliviar los gastos salariales sin despedir de manera definitiva, esperando la recuperación. Al finalizar el ERTE, los empleados regresan a sus puestos de trabajo habituales.