fecha de respuesta: 10.11.2024
El turismo de salud combina servicios turísticos con tratamientos médicos o wellness. Si se ofrecen actos sanitarios (cirugías estéticas, rehabilitación), se aplica la normativa sanitaria: la clínica o balneario debe disponer de licencia de centro médico, profesionales colegiados, seguros de responsabilidad, etc. No se distinguen pacientes locales o extranjeros en cuanto a requisitos, aunque la comunicación en otro idioma puede generar mayor diligencia en la información previa y el consentimiento informado. Puede haber colaboraciones con hoteles para alojar a los pacientes. El marketing debe ajustarse a la Ley de Publicidad Sanitaria, que prohíbe anuncios engañosos sobre resultados médicos. Así, la oferta turística no exime del cumplimiento estricto de la ley sanitaria.