fecha de respuesta: 12.01.2025
La certificación de semillas y plantas de vivero la supervisan organismos nacionales y autonómicos como el Instituto Nacional de Semillas y Variedades Vegetales. Verifican la pureza, la germinación y sanidad. La venta de semilla o planta no certificada puede estar prohibida para ciertas especies y variedades, salvo autoconsumo del agricultor. Las casas comerciales deben inscribirse en los registros de producción y comercialización de semillas, exhibiendo etiquetas oficiales que indican categoría (base, certificada, etc.). Así se garantiza la trazabilidad, la calidad y se previenen plagas y fraudes genéticos. El agricultor debe adquirir semillas en canales legales para asegurar la idoneidad y el cumplimiento de los derechos de obtentor.