fecha de respuesta: 15.11.2024
La mediación familiar es un método voluntario donde un profesional imparcial ayuda a los progenitores a alcanzar un acuerdo sobre la manutención y otros aspectos. Si consiguen consenso, pueden plasmarlo en un convenio que luego se homologa judicialmente para tener validez. Así evitan el pleito contencioso. Si la mediación fracasa, se pasa al proceso judicial. La mediación no reemplaza la jurisdicción, pero favorece soluciones amistosas y rápidas. En algunos juzgados se insta a las partes a intentar mediación antes del juicio.