fecha de respuesta: 28.11.2024
La Ley Orgánica 1/2015 modificó el Código Penal, tipificando la corrupción en el deporte. Se considera delito influir de forma fraudulenta en el resultado de una competición deportiva profesional o semiprofesional, sancionable con penas de prisión y multas. Además, la Ley 13/2011 del Juego prohíbe apuestas fraudulentas. Existen convenios con la Guardia Civil y la Policía para investigar redes de amaños y sobornos. Las federaciones también imponen sanciones deportivas (descenso de categoría, inhabilitación) a clubes o futbolistas implicados. Entidades como la UEFA tienen su propio departamento de integridad y cooperan con autoridades nacionales. Se considera un ataque grave a la transparencia deportiva y al fair play.