fecha de respuesta: 09.11.2024
El deber de información obliga al empresario a facilitar datos veraces, comprensibles y suficientes sobre las características principales del bien o servicio, su precio total (con impuestos y gastos), las condiciones de entrega, la garantía legal, los métodos de pago, el derecho de desistimiento (si procede) y cualquier restricción relevante. Esto se debe mostrar antes de cerrar la compra, para que el consumidor decida con pleno conocimiento. Este requisito se aplica tanto en tiendas físicas como en el comercio electrónico, donde además deben indicarse datos del vendedor, políticas de devolución y, en casos de servicios digitales, cuestiones sobre compatibilidad y funcionalidad. Si falta información esencial o se presenta de manera engañosa, puede considerarse infracción y el contrato sería anulable o sancionable.