fecha de respuesta: 15.11.2024
La Ley 14/2007 de Investigación Biomédica y el RGPD protegen la información genética como dato especialmente sensible. Los test genéticos sólo pueden hacerse con consentimiento específico y en un entorno sanitario o investigativo legalmente regulado. Las aseguradoras no pueden obligar a un cliente a aportar test genéticos para suscribir un seguro, pues vulneraría la intimidad genética. Los datos genéticos se usan exclusivamente con fines médicos (diagnóstico, terapia) o científicos, y su tratamiento exige garantías reforzadas. Cualquier uso o cesión sin consentimiento expreso, salvo excepciones legales, constituye infracción grave.