fecha de respuesta: 15.01.2025
La Dirección General de Consumo (integrada en el Ministerio de Consumo) se ocupa de la propuesta de normativa nacional, coordinación de políticas de protección al consumidor, supervisión de la cooperación con las comunidades y la UE, y fomento de la educación al consumidor. No sanciona directamente, pues la competencia sancionadora recae en las CCAA o en otros organismos (como CNMC en materias de competencia). Sin embargo, puede promover planes nacionales, emitir informes, vigilar sectores específicos y tramitar reclamaciones de ámbito estatal. Su papel es de armonización y coordinación, evitando solapamientos con órganos autonómicos, que actúan en su territorio, y con la CNMC, que se centra en la libre competencia, no en la defensa individual del consumidor.