fecha de respuesta: 24.12.2024
La concesión administrativa permite que un particular preste un servicio público o explote un dominio público (infraestructuras, recursos) en nombre de la Administración, asumiendo riesgos y cobrando una tarifa a los usuarios o recibiendo pagos públicos. Se adjudica mediante un contrato de concesión, con duración limitada. La autorización es un acto por el cual la Administración da permiso para usar un bien público o ejercer una actividad, pero sin atribuir la gestión del servicio público ni la titularidad del dominio. Las concesiones implican mayor responsabilidad y suelen requerir un concurso público, mientras la autorización puede ser más sencilla y sujeta a normativa sectorial.