fecha de respuesta: 14.01.2025
Sí, la telemedicina implica tratamiento de datos de salud, datos especialmente protegidos según el RGPD y la LOPDGDD. El responsable (el centro o el médico) debe asegurar plataformas seguras, con cifrado y garantías de confidencialidad. Requiere un consentimiento informado del paciente para usar la teleconsulta, explicando cómo se guardan las grabaciones si las hubiera y quién accede a ellas. No basta con usar cualquier aplicación de videollamada sin contrato de encargado con la empresa proveedora, pues se manejan datos muy sensibles. El incumplimiento puede suponer sanciones por la AEPD. Además, hay que verificar la equivalencia a la consulta presencial en términos de calidad asistencial y respeto al secreto médico.