fecha de respuesta: 04.01.2025
Sí, el procurador tiene la obligación de diligencia en la tramitación procesal. Si incumple su deber, por ejemplo, no presenta un recurso a tiempo y provoca la caducidad de acciones, puede incurrir en responsabilidad civil. El cliente perjudicado puede reclamar daños y perjuicios, probando la negligencia (falta de cuidado razonable) y el perjuicio sufrido. Además, el colegio profesional puede sancionarlo si hay mala praxis. Es fundamental que el procurador comunique al cliente y al abogado las incidencias del proceso y respete los plazos. La negligencia grave puede conllevar responsabilidad y podría motivar una reclamación ante los órganos colegiales y tribunales civiles.